La mierdosa reforma energéticaFrancisco Javier Chaín Revuelta
Realmente el Padre de la Patria no fue el cura Miguel Hidalgo y Costilla sino el general Lázaro Cárdenas del Río. Es claro que no se puede tener real independencia política si no se tiene independencia económica. Con la nacionalización del petróleo a finales de los años treinta del siglo XX por parte del patriota mexicano “Tata” Cárdenas se logró algo de independencia para este país. Y eso no le gusta a los panistas, a los curas, a la derecha, a los pri-anistas, a la iglesia, a los traidores a la patria, ni a los lacayos del capital extranjero que se encuentran representados (toda esa nefasta fauna) por el tal calderón, ese espurio rey que tuvo a mal designarse por el ife y un dizque tribunal. Esta minoría de mierda se apresta a regresar la independencia a los imperios coloniales en contra de lo que piensa la mayoría de mexicanos decentes de este país.
Para el ocho de abril de 2008 los mexicanos, lo que son mexicanos, los que tienen patria y no dinero, la
mayoría de las personas que habitan este país, esa mayoría que conforman las personas dignas, estaba ya hasta la madre de ser bombardeados de mentiras por esa minoría que usurpa el gobierno federal, por los lacayos adoradores de los becerros de oro y por ese puñado de locutores del país que tuercen el hocico cada segundo que dedican a engañar a los televidentes y radioescuchas diciendo que “todos” los mexicanos si quieren “fortalecer” –así dicen- a PEMEX.
Lo que la mayoría de personas de este país quiere es que dejen ya de sangrarlos y dejen de decirles mentiras, lo que la gente de este país quiere es que nadie decida por ellos, si quieren reformar leyes y hacer cambios importantes que afecte a la población, no tienen porque decidir por ellos, ya que lo que ellos piensan, con las bolsas llenas de dinero, contratos y privilegios, no es lo mismo que piensa y quiere la mayoría de los habitantes decentes y trabajadores de este país.
Lo que en la calle dice la gente de la reforma energética es que ya basta que el gobierno encarezca la vida y la salud de los mexicanos, que ya dejen los principales del gobierno de mamar del presupuesto nacional y que ya dejen de decidir por todos. Ya es hora, dice la
gente la calle, que se tome en cuenta a la gente, que se hagan referendums y plebiscitos para las tomas de decisiones importantes de este país.
Los mexicanos no se chupan el dedo como creen todos esos mierdosos lacayos del capital extranjero, cualquier persona decente de este planeta y en sus cabales sabe de antemano que asociar y entregar PEMEX a los capitales privados nacionales y extranjeros es acabar con México como país.
Las personas decentes de este mundo ya saben que en la medida que se aumenta la producción de petróleo, en esa misma medida, o más, se acelera el cambio climático y la destrucción del planeta. Usar el petróleo como combustible es como prender cigarrillos con billetes de a millón de pesos. El petróleo es materia prima para tantas cosas y tantos productos, que es irrazonable, imprudente y tonto el quemarlo.
Aquellos que se crean democráticos, que consulten a todos los mexicanos, que les pregunten en plebiscito o referéndum si quieren esa pinche reforma energética espuria del calderón & lacayos y sabrán lo que es una repulsa popular a las traiciones a la Patria.
fjchain@hotmail.com
Realmente el Padre de la Patria no fue el cura Miguel Hidalgo y Costilla sino el general Lázaro Cárdenas del Río. Es claro que no se puede tener real independencia política si no se tiene independencia económica. Con la nacionalización del petróleo a finales de los años treinta del siglo XX por parte del patriota mexicano “Tata” Cárdenas se logró algo de independencia para este país. Y eso no le gusta a los panistas, a los curas, a la derecha, a los pri-anistas, a la iglesia, a los traidores a la patria, ni a los lacayos del capital extranjero que se encuentran representados (toda esa nefasta fauna) por el tal calderón, ese espurio rey que tuvo a mal designarse por el ife y un dizque tribunal. Esta minoría de mierda se apresta a regresar la independencia a los imperios coloniales en contra de lo que piensa la mayoría de mexicanos decentes de este país.
Para el ocho de abril de 2008 los mexicanos, lo que son mexicanos, los que tienen patria y no dinero, la
mayoría de las personas que habitan este país, esa mayoría que conforman las personas dignas, estaba ya hasta la madre de ser bombardeados de mentiras por esa minoría que usurpa el gobierno federal, por los lacayos adoradores de los becerros de oro y por ese puñado de locutores del país que tuercen el hocico cada segundo que dedican a engañar a los televidentes y radioescuchas diciendo que “todos” los mexicanos si quieren “fortalecer” –así dicen- a PEMEX.Lo que la mayoría de personas de este país quiere es que dejen ya de sangrarlos y dejen de decirles mentiras, lo que la gente de este país quiere es que nadie decida por ellos, si quieren reformar leyes y hacer cambios importantes que afecte a la población, no tienen porque decidir por ellos, ya que lo que ellos piensan, con las bolsas llenas de dinero, contratos y privilegios, no es lo mismo que piensa y quiere la mayoría de los habitantes decentes y trabajadores de este país.
Lo que en la calle dice la gente de la reforma energética es que ya basta que el gobierno encarezca la vida y la salud de los mexicanos, que ya dejen los principales del gobierno de mamar del presupuesto nacional y que ya dejen de decidir por todos. Ya es hora, dice la
gente la calle, que se tome en cuenta a la gente, que se hagan referendums y plebiscitos para las tomas de decisiones importantes de este país.Los mexicanos no se chupan el dedo como creen todos esos mierdosos lacayos del capital extranjero, cualquier persona decente de este planeta y en sus cabales sabe de antemano que asociar y entregar PEMEX a los capitales privados nacionales y extranjeros es acabar con México como país.
Las personas decentes de este mundo ya saben que en la medida que se aumenta la producción de petróleo, en esa misma medida, o más, se acelera el cambio climático y la destrucción del planeta. Usar el petróleo como combustible es como prender cigarrillos con billetes de a millón de pesos. El petróleo es materia prima para tantas cosas y tantos productos, que es irrazonable, imprudente y tonto el quemarlo.
Aquellos que se crean democráticos, que consulten a todos los mexicanos, que les pregunten en plebiscito o referéndum si quieren esa pinche reforma energética espuria del calderón & lacayos y sabrán lo que es una repulsa popular a las traiciones a la Patria.
fjchain@hotmail.com
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