Aunada a la espera de cierre del basurero, los pepenadores rechazan la clausura del lugar
Tatiana Martínez C /El Mundo de Córdoba
México 23 de marzo, 2008
Actividades rutinarias ayer en el basurero de 2o de Noviembre.
El Mundo de Córdoba
México 23 de marzo, 2008
Actividades rutinarias ayer en el basurero de 2o de Noviembre.
El Mundo de Córdoba
Los pepenadores no quieren que sea clausurado el tiradero municipal de 20 de Noviembre, pues para ellos representa una fuente de ingresos para comer cada día. Ante las pocas posibilidades de empleo al ser hombres y mujeres sin estudios, su preocupación es por igual.
Bajo los intensos rayos del sol, nubes espesas de polvo y el movimiento de las máquinas, ellos buscan entre la basura el plástico, cartón, aluminio, chatarra o cobre que después venden a dos compradores que ingresan hasta el basurero.
Siempre están acompañados de cientos de zopilotes que igual surcan el cielo o caminan entre los restos de desperdicios junto a ellos; así como de decenas de perros y ratas.
En lista y con permiso de la dirección de Limpia Pública hay 25 pepenadores, y de fuera llegan unos 30, todos con las mismas necesidades. De sus 33 años, Rosalba Méndez Pacheco, ha pasado casi veinte en el tiradero municipal.
A los 13 años empezó a acompañar a su madre que también era pepenadora. Pero desde hace 10 años, realiza este trabajo sola para mantener a 5 hijos de 3, 12, 14, 15 y 16 años. “Dependemos de ese trabajo, de aquí comemos, de aquí pago los estudios de mis niños”, lamenta Rosalba.
‘ Si los cierran voy a sentir feo porque de aquí nos vestimos, nos calzamos, comemos”
Julia Cansino Tepixtle
Recolectora dentro del Tiradero de 20 de noviembre
Bajo los intensos rayos del sol, nubes espesas de polvo y el movimiento de las máquinas, ellos buscan entre la basura el plástico, cartón, aluminio, chatarra o cobre que después venden a dos compradores que ingresan hasta el basurero.
Siempre están acompañados de cientos de zopilotes que igual surcan el cielo o caminan entre los restos de desperdicios junto a ellos; así como de decenas de perros y ratas.
En lista y con permiso de la dirección de Limpia Pública hay 25 pepenadores, y de fuera llegan unos 30, todos con las mismas necesidades. De sus 33 años, Rosalba Méndez Pacheco, ha pasado casi veinte en el tiradero municipal.
A los 13 años empezó a acompañar a su madre que también era pepenadora. Pero desde hace 10 años, realiza este trabajo sola para mantener a 5 hijos de 3, 12, 14, 15 y 16 años. “Dependemos de ese trabajo, de aquí comemos, de aquí pago los estudios de mis niños”, lamenta Rosalba.
‘ Si los cierran voy a sentir feo porque de aquí nos vestimos, nos calzamos, comemos”
Julia Cansino Tepixtle
Recolectora dentro del Tiradero de 20 de noviembre
No hay comentarios:
Publicar un comentario